Sumario de una discusión con Shiv Charan Singh del 1 de Enero 2007 en la corte de Karam Kriya en el retiro internacional en Holanda.
Mientras exista “mi voluntad”, no puede existir “Su voluntad”. Pero al mismo tiempo tiene que existir mi voluntad para poder así ofrecérsela a Su voluntad. Sin la voluntad individual la auto-iniciación no sería posible.
Si mi propia voluntad cesara de existir yo también dejaría de ofrecerme voluntariamente. El camino místico nos pide que constantemente nos ofrezcamos, respiración tras respiración, entonces hay una paradoja y es también un gran misterio.
Resolver esta paradoja es una batalla perdida para la mente, porque se trata de la naturaleza misma de la paradoja, que no puede ser resuelta. Una paradoja es dos opuestos co-existiendo en un punto (el mismo tiempo y espacio). La mente vive en el laberinto donde existe la ilusión de “esto o aquello”, entonces, si estamos tratando de entender esto con la mente, vamos a empezar a crear un problema infinito, un infierno auto-generado.
En este infierno auto-creado seguimos sufriendo. (7 pasos al infierno) Seguimos sufriendo y es porque la mente está tratando de aferrarse a algo que está más allá de la mente.
Podríamos vivir en la felicidad si tan solo pudiéramos dejar de tener un problema con eso, reconocer, aceptar y estar de acuerdo plenamente con esa paradoja y abrazar esa paradoja desde el corazón.
Cuando nuestro corazón abraza la paradoja y vivimos en ese abrazar a la paradoja, vamos a tener la claridad de que sólo hay un camino a seguir, que es nuestro pequeño margen de elección encontrándose con la inevitable voluntad de Dios. Eso significa dar nuestro 10 por ciento de voluntad al 90 por ciento de la voluntad de Dios, y decir: “Dios, estoy contigo”, (7 pasos a la felicidad empezando con el compromiso) reconozco, acepto y estoy de acuerdo con tu voluntad. Me ofrezco y me comprometo.
Nunca vamos a conocer y disfrutar de esta elección mientras estemos ocupados pensando y debatiendo.
Lo que no sabes es que cuando dejas de pensar acerca de si tienes o no elección entonces, y sólo entonces, es cuando descubresqué elección realmente tienes. No lo sabes todavía porque estás ocupado pensando. A través del pensamiento mismo no puedes saber o decir qué descubrirás cuando dejes de pensar, sólo cuando realmente detengas la mente y despiertes la conciencia intuitiva es cuando vas a descubrir: “No tengo elección”, o: “Tengo elección”, o bien: “Tengo elección de reconocer que no tengo elección.” No sabes qué va a suceder, y no lo sabrás mientras continúes pensando en ello.
Lo que sea que pienses no es la realidad, la realidad es cuando dejas de pensar acerca de la realidad y estás disponible a experimentar la realidad. Y si estás dispuesto a experimentar la realidad, vas a entender absolutamente por qué estás donde estás y también entenderás que es porque no tienes elección y al mismo tiempo, porque sabes que vas a estar de acuerdo con ello, por tanto también estarás escogiendo las cosas que no tienes opción de elegir, y no vas a tener preguntas.
Por el hecho de que tenemos la opción de no sufrir el infierno de nuestra mente, ciertas personas tuvieron la compasión de escribir las enseñanzas en forma de escrituras. Esto nos ofrece una llamada a despertar y recordar, así como, que un día seamos bendecidos para poder leerlo, escucharlo y realmente elegir el vivir por la paradoja descrita ahí, en lugar de luchar en contra de ella.
Las escrituras contienen dos lógicas: Una en el hecho de que está escrito y la segunda es el hecho de lo que está escrito. Está escrito en las escrituras que todo es voluntad de Dios, lo cual parece excluir la existencia de una voluntad individual. De hecho, también implica “entrega tu cabeza”, y esto no lo podría hacer si no existiese mi propia voluntad. Entonces, las escrituras tienen en sí mismas un significado paradójico, que no puede ser completamente entendido por la mente. Ya que no tengo opción, entonces, ¿qué diferencia puede crear el que yo lea o escuche las enseñanzas? Aún así, el escuchar y leer las enseñanzas puede despertar la única opción que tengo y causar toda la diferencia en mi vida.
Lo difícil es renunciar a tu mente. Esa es la elección más difícil que cualquier ser humano tiene que hacer y la única elección. Lo que está temporalmente disponible para ti es la decisión acerca de cuándo y dónde te postrarás, en qué punto vas a entregar tu mente.y en qué Altar vas a dejar tu cabeza para descansar finalmente y decir: “No tengo más preguntas”.
(traducción: JJK corregido por Seva Kaur Khalsa)
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